Por Odalys Buscarón Ochoa
Moscú, 27 feb (PL) Tras el encuentro del canciller ruso, Serguei Lavrov, y el flamante secretario norteamericano de Estado, John Kerry, las preocupaciones de Rusia sobre el despliegue del sistema antimisiles de Estados Unidos en Europa persisten, sin progreso alguno.
La reunión celebrada en Berlín generó expectativas en una posible recomposición de las relaciones ruso-estadounidenses, estancadas en los dos últimos años ante la renuencia de Washington de ofrecer garantías jurídicas a Moscú de que el escudo no apunta a territorio ruso, destacaron medios informativos.
Ante versiones difundidas por la prensa, como colofón de la cita, Lavrov desmintió que las partes tuvieran en planes un intercambio de declaraciones sobre el sistema antimisiles (DAM, por sus siglas en inglés).
Si no podemos ponernos de acuerdo sobre un sistema común, como Rusia propuso desde 2007, cuando el presidente Vladimir Putin visitó a Estados Unidos, entonces hay que tener garantías de que el sistema DAM no está dirigido contra el potencial nuclear ruso, subrayó el canciller.
La postura de Rusia, recalcó, Lavrov, es invariable, e insistió en la necesidad de llegar a un acuerdo que permita garantizar una seguridad común, sin que un país garantice su seguridad a costa del otro estado.
Con el retorno del presidente Barack Obama a la Casa Blanca se renovaron las expectativas de un progreso en algunos temas «irritantes de la agenda», como el DAM, destaca un reportaje del canal Russia 24.
La fuente se refirió incluso a la posibilidad de que Obama firmara una declaración sin el visto bueno del Congreso, como un gesto de voluntad para descongelar las relaciones, y de otro lado, lograr gestos de Rusia en otros asuntos.
Para el responsable de la revista Procesos Internacionales, Alexei Fenenko, el intento de Obama de mostrar flexibilidad a espaldas del Congreso resulta un juego «del policía bueno y el policía malo». Uno nos amenaza con misiles, otro promete solucionar el problema.
En esencia las negociaciones siguen congeladas hace dos años y hasta la fecha Washington sigue sin reconocer las propuestas rusas de crear un sistema sectorial común del DAM, aseveró el experto.
Tampoco resultaron exitosos los recientes intercambios durante la visita a Moscú de la subsecretaria de Estado Rose Gottemoeller acerca de la reducción de los arsenales nucleares en un 50 por ciento, recordó el analista.
Fenenko puso en dudas no solo la veracidad de una declaración por parte de Obama, sino su propia efectividad. Intenciones similares de cooperación afloraron hace más de 20 años, y al final las propias autoridades norteamericanas las ignoraron, concluyó.
En la agenda del encuentro de Lavrov con Kerry figuró también la preocupación de Rusia sobre la situación de los niños rusos adoptados por familias estadounidenses, y sobre el particular el secretario de Estado prometió la adopción de medidas para hacer más transparente la situación y garantizar una cooperación plena.
Sobre Siria, el propio Lavrov declaró que existió una comprensión común de no soportar más la violencia y el derramamiento de sangre, y la decisión de hacer todo cuanto sea posible por parte de Rusia y de Estados Unidos para que las partes se sientan a dialogar, según la versión oficial.
Con anterioridad a la reunión de Berlín, Kerry se mostró partidario de ofrecer un mayor apoyo a la oposición siria y exigió la renuncia del presidente Bashar al Assad, en sintonía con la línea seguida por su antecesora, Hillary Clinton, apunta el canal internacional Russia Today.