Bogotá, 3 may (PL) Un grupo de corresponsales de la prensa extranjera acreditada en Colombia exigió hoy respetar la integridad física y la libertad inmediata del periodista francés Romeo Langlois, cuya situación es incierta desde el pasado sábado.
Langlois, de 35 años y corresponsal de la televisión France 24, se encontraba realizando un reportaje sobre operaciones antidrogas de las Fuerzas Militares ese día en el departamento de Caquetá, cuando se registraron combates con la guerrilla.
Frente a esa situación, de acuerdo con la versión de algunos militares, el comunicador se despojó del casco y el chaleco antibalas que portaba y corrió hacia donde se encontraba el grupo insurgente.
En un comunicado, los corresponsales de la prensa extrajera señalan que quienes cubren en terreno el conflicto social y armado colombiano, exigen el respeto a la vida, la libertad y la integridad física de Langlois.
Asimismo, sostienen que el Derecho Internacional Humanitario protege en todo tiempo y lugar, la labor de los periodistas en un conflicto.
En ese sentido refieren que los corresponsales no pierden su condición de civiles protegidos y como tales deben ser tratados, aun cuando acompañan en una misión peligrosa a un Ejército o grupo armado, o se benefician de su apoyo logístico.
A su vez, expresan que Langlois no es un corresponsal de guerra, según el Derecho Internacional Humanitario, puesto que no trabaja para la ventaja militar o propagandística de ningún bando.
«El hecho de viajar con uno de los actores armados es parte de la labor periodística y no significa una pérdida de independencia», recoge el texto.
Por otra parte, los corresponsales esperan que Langlois regrese a casa tan pronto las condiciones de seguridad lo permitan, como una muestra de respeto a la cobertura periodística independiente.
Hasta el momento se desconoce el paradero del reportero francés, si bien se especuló que puede estar en poder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), aunque ese grupo no ha confirmado esa versión por sus canales tradicionales.
rmh/acl
Colarebo 