Ramón Martínez.
Durante miles de años, la característica común de todas las sociedades ha sido la opresión , la esclavitud sexual, económica y social de las mujeres. Aunque la lucha por la igualdad entre hombres y mujeres depende de las especificidades sociales, económicas y culturales de cada país o región, no debemos olvidar que la opresión es el resultado de un sistema dominado por los hombres.
El sistema capitalista se basa en las desigualdades sociales y económicas, siendo esta su característica fundamental, que ademas se nutre de ella. las crisis económicas, las guerras, el incremento del militarismo y el racismo hace que las mujeres sean aún más desfavorecidas.
Vemos como se reduce el presupuesto para la salud en los países desarrollados y los beneficios que se reducen directamente a las mujeres , haciendo campañas contra el aborto, mostrando a la mujer como hecha para concebir, siendo esta su principal función, campañas como estas van encaminadas a terminar con derechos que han conseguido las mujeres con intensas luchas.
Causas de esta situación obliga a miles de mujeres originarias de países del tercer mundo a emigrar y caer en redes de prostitución, viendo mancillado su honor y sintiéndose seres inferiores que no tienen posibilidad de desarrollar su infinidad de cualidades, como seres humanos, valga decir que en otras regiones la circuncisión esta al orden del dia y miles de mujeres son victimas de esta oprobiosa practica.
Como vemos son infinidad de hechos que nos demuestran como la sociedad, trata a la mujer, convirtiéndola en mercancía y sometiéndolaa múltiples infamias y al escarnio público.
Justamente hoy se cumplen 100 años de la gesta del 8 de marzo, de 1910, en donde se inmolaron decenas de mujeres en la lucha por sus derechos, valga púes, señalar que los tiempos cambian y por fin la emancipación de la mujer, no es solo lucha de ella, si no tambien de nosotros los hombres conscientes de los cambios y de las necesidades históricas; en que tenemos que ser una sociedad de iguales, juntos caminamos en la vía, de la construcción de una sociedad justa e igualitaria.
R.M